Todos hemos estado ahí. Todos nos hemos enamorado de alguien quien no nos correspondió. Hemos escuchado cada clase de líneas para cortar con nosotros: “Creo que es hora de comenzar a ver a otras personas”, “Te amo, pero no estoy enamorad de ti” o “No se trata de ti, soy yo”.

Resulta difícil aceptar cuando la otra persona deja de corresponder las llamadas telefónicas, pero es aún peor cuando siguen llamando después de la ruptura. Salir al encuentro de la persona a quien debemos nuestro afecto es fatal, en especial si ella da señales mixtas, al hacer contacto visual persistente. No sirve cuando envían un email cada cuanto para ver como te va, tampoco.

En lugar de eso, resulta fácil engañarte a ti mismo. Decirte que esta persona sí te ama de verdad pero tiene miedo de salir herida. ¡Pobrecita! Si tan solo pudieras convencerla de que tu eres un alma incapaz de causar doloar. Si tan solo pudieras probar tu confianza, tu dedicación. ¡La conquistarías! ¡La harías ver quien eres! ¡Podrías!

Te engañas con estas ideas recostado en tu cama durante la noche repasando las escenas felices que hubo entre ustedes. Recuerdas la gentil manera en que te miró mientras recitabas las líneas de un poema que le dedicaste durante una cena a la luz de las velas. Traes a la mente el recuerdo de ese beso que aprisionaste con tus labios sujetando su labio inferior mientras miraban la puesta del sol en la playa. ¡Seguro esa chica te ama! ¿Por qué tienen que vivir en un sufrimiento tal de amar y ser amados?

Y así sigue la historia. Te enmarañas en tu creencia de que alguien que ya no te ama, realmente sí te ama, cegándote a las oportunidades de conocer a otra persona que sí te hara de verdad feliz.

No puedes avanzar hasta que dejes de obsesionarte, pero es más fácil decirlo que hacerlo, ¿no? Esto es lo que te sugiero que hagas:

Dile a la otra persona que desaparezca de tu vida. Tal y como tú tienes que dejar de tener contacto con la chica, ella tiene que dejar de tener contacto contigo. Dile que no estás listo para ser amigos y ni estás seguro si lo serán. Cualquier email que te envíen preguntando sobre tu bienestar será marcado como no leído o mejor, como SPAM.

Escribe todas las cosas que te molestaron. Después de que terminan contigo, es natural idealizar a la chica que partió tu corazón. Nadie es perfecto. Todos cometemos faltas, así que escribe una lista de aquellas ocasiones en que te maltrató verbal, psicológica o físicamente, para que puedas igualmente recordar esos momentos cuando comiences a idealizar a esta chica. Ten una copia en el espejo del baño para cuando estés ahí, de modo que sea lo primero que veas en la mañana.

Arroja a la basura cualquier recuerdo. No tiene por qué ser un regalo. Podría ser un libro que discutieron, una botella de vino que compartieron que se encuentra aún en la cocina, o las sábanas con las que durmieron juntos. Comienza de nuevo, comienza de cero, reemplaza todo.

Apaga la radio. Estás en control de la situación, todo va bien, cuando de pronto una canción sale por la radio que te recuerda a esa chica que te obsesiona. Cambia de emisora. Apaga la radio. Actúa rápido, o en un instante volverás a donde estabas al inicio, en ese círculo vicioso de sentirte enamorado, deprimido, con esperanza y desilusionado.

Imagínate a esa chica de una forma que te repugne. No importa usa tu imaginación y visulízala tal vez vistiendo una prenda con la que se vería desagradable en un lugar público.

Haz un compromiso. La razón por la que te obsesiones con las chicas que te han hecho daño es porque es lo más cómodo de hacer. Vamos, algunas veces es incluso divertido. Pero para encontrar el amor que te mereces, tienes que hacer un compromiso de dejar de obsesionarte. Así que hazlo. Recuerda, lo opuesto al amor no es el odio, es la indiferencia. Cuando eres indiferente a la chica que te hizo daño, realmente estarás libre en tu camino hacia la verdadera felicidad y nosotros aquí en SeduceMujeres.com estamos para orientarte en ese trayecto con nuestra guía de seducción el Manual Seduce Mujeres y la asistencia personalizada que recibes cuando formas parte de nuestra comunidad de usuarios.