Todos los días, los heterosexuales están inmersos en baño tóxico de lesbianismo, homosexualidad, obscenidad, pedofilia y promiscuidad sexual diseñada para transformar a la sociedad. Aún así, los heterosexuales parecen felizmente inconscientes de este ataque.

El 10 de Junio de 2011, la policía de Nueva York multaron a dos mujeres a dos mujeres que comían donas en la banca de un parque.

Ellas violaron una regulación (una de 15 listadas en un letrero) que prohibe a los adultos a entrar al lugar de recreo a menos que esté acompañado de un niño.

Esto es supuestamente para frenar a los pedófilos. Otras ciudades en los Estados Unidos, incluyendo a Miami Beach y San Francisco, tienen ordenanzas similares las cuales han sido extendidas a bibliotecas y museos para niños.

El invierno pasado, siete hombres en Nueva York fueron multados por jugar ajedrez en un parque. En Idaho, un hombre fue arrestado por tomar fotos a un niño, quien resultó ser su nieto.

“Es el pánico a la pedofilia”, dice la escritoria neoyorkin, Lnore Skenazy. “Todos son pedófilos hasta que se pruebe lo contrario”.

Ya que el 98% de la población es heterosexual, esto calumnia a la gran mayoría. Esto también ataca al modelo heterosexual de sociedad basado en la familia humana. Todos somos hermanos y hermanas, padres y madres: protectores de todos los niños.

En un ingenioso apretón de manos, transfieren el estigma de la pedofilia a los heterosexuales. Los estudios demuestran que los homosexuales son tan solo el 2 por ciento de la población y representan entre el 25-40% del abuso de menores. Pero el objetivo es que la heterosexualidad sea vista como una patología (ej. abuso doméstico, etc).

“Por mi parte, desearía tener un par de mujeres sentadas en un patio de recreo como un par de ojos extra”, escribe Skenazy. “Cuando comienzas a tratar a todos como malvados, no puedes tener una comunidad”.

¡Bingo! En lugar de ser una gran familia humana, somos un puñado de depredadores sexuales. Tienes que darle crédito a los satanistas que te gobiernan, sí, aquellos por quienes tu votas en las elecciones, ellos sí saben cómo hacer de la sociedad un infierno.

ELIMINACIÓN DE LA HETEROSEXUALIDAD

Los ingenieros sociales de la Élite Financiera atacan la heterosexualidad ya que es la base de la identidad humana. Nuestras relaciones y responsabilidades primordiales son definidas por las palabras del padre, de la madre, del esposo, de la esposa, de la hermana, del hermano, del hijo y de la hija.

Un sólido matrimonio heterosexual y la familiacrea un ambiente pleno para criar a la siguiente generación. Si deseas una familia saludable, los hombres y las mujeres deben consagrarse y planificar para esta tarea. Nuestros niños representan nuestro crecimiento orgánico, nuestro nexo con la eternidad.

En lugar de esto, los heterosexuales se hayan inmersos en un baño tóxico de lesbianismo, homosexualidad, obscenidad, desviación sexual, pedofilia y promiscuidad, diseñado para corroer y distorsionar nuestra sexualidad.

Las mujeres jóvenes “progresistas” marchan por el derecho a comportarse como “putas”. Las escuelas favorecen a los homosexuales para las becas. Las canciones pop como las de Katy Perry “I Kissed a Girl (and I liked it!)” ha obtenido más de cuatro millones de descargas pagadas. Los guiones de las series más vistas de TV muestran a gays y pornografía gay. Los profesores motivan a los niños para buscar el sexo, bajo la guisa de educación sexual. Las niñas pequeñas son sexualizadas. Plaza Sésamo ha tenido que luchar contra las demandas ridículas de que dos títeres, Bert y Ernie, ¡sirvan como roles positivos de matrimonio homosexual!

Esto socava el matrimonio y la familia tradicional. Casi el 50% de lasmujeres que han perdido la virginidad en la juventud estaban divorciadas diez años después. Cuarenta tres por ciento de las mujeres con educación universitaria nacidas entre 1965 y 1978 no tienen niños, según una nueva investigación.

Nuestra sociedad ha sido subvertida por los sionistas banqueros centrales satanistas (cabalistas) y sus traidores esbirros masónicos quienes buscan que el Estado lidien con la procreación (como fue previsto por Aldous Huxley en su libro “El Mundo Feliz”). Estamos siendo sometidos a una reingeniería para servirles como trabajadores y consumidores obedientes y como zánganos soldados/policías.

La razón por la que estamos ciegos a esta vicioso ataque solapado es que lo disfrazan como “derechos de los homosexuales” y a cualquier oposición a esto como “homofobia”.

Unas cuantas búsquedas en Google ilustran cómo este vicioso ataque heterofóbico vuela invisible a nuestro radar. Si buscas “heterofobia” (ej. miedo a la heterosexualidad) obtienes 107,000 resultados, la mayoría sin relación a lo que está pasando en la actualidad.

Pero si buscas en Google “homofobia” (ej. miedo a la homosexualidad) obtienes 7,140,000 resultados, 66 veces más referencias, la mayoría despectivas. Ya que los gays son 1/50vo de la población, la disparidad es más o menos de 4000 a uno.

Noté esto cuando buscaba en Google una imagen para heterofobia. Habían 18,200, pero casi ninguna aplicaba. En cambio, habían 895,000 imágenes para homofobia, es decir 49 veces más.

La homosexualidad obtiene casi siete veces tantos hits como la heterosexualidad, a pesar de ser 1/50vo del segmento demográfico.

Nos controlan mentalmente y nos manipulan y no tenemos idea de lo que está pasando.

CÓMO NOS MANIPULAN

La esencia de la atracción heterosexual es el poder masculino. Incluso el satanista Henry Kissinger dijo “el poder es el más grande afrodisíaco”.

Si debo dar algún consejo a los hombres interesados en conquistar a una mujer, es el de manifestar poder.

Casi todos los programas de televisión y las películas ahora promueven el poder femenino y la irresponsabilidad y falibilidad masculina. Casi todos las series muestran una mujer agresiva ej. Maria Bello en “Primer Suspect”. A menudo las mujeres son representadas de una forma irrealista como golpeando a los hombres.

Esto deliberadamente golpea el corazón de la heterosexualidad. Las mujeres solían empoderar al hombre cediendo su poder a ellos. Ahora se les enseña inconscientemente a competir contra los hombres y acabar con ellos.

Esto es contra natura donde la cultura ha inflado el estatus de las mujeres presentándolas como una raza perseguida y elevando al acto sexual como un sagrado sacramento.

Este empoderamiento de las mujeres a costa de los hombres neutraliza a los heterosexuales y promueve la confusión de género y la homosexualidad. Aún así, las masas felizmente son indiferentes a lo que les está pasando. Son como borregos pastando mientras la Élite Financiera construyen un matadero a la vuelta de la esquina.

CONCLUSIÓN

Cuando leí el libro de George Orwell “1984”, a la edad de 15, jamás me imaginé que viviría en una sociedad que practica una insidiosa modificación del comportamiento y una re-ingeniería social.

Los heterosexuales necesitan hacer saber a las televisoras y a los publicistas que boicotearemos sus productos si se involucran en esta práctica socialmente auto-destructiva.

La heterosexualidad y la homosexualidad no son compatibles. (A pesar de excepciones bien publicitadas, la vasta mayoría de homosexuales no desean casarse ni tener niños). Los heterosexuales deben reconocer que si no se atreven a determinar las normas sociales, la pequeña minoría homosexual lo hará (financiados por la Élite). Mientras esto sucede, la mayoría se erosionará, se convertirá en una minoría y eventualmente desaparecerá ante la homosexualidad.